El martes pasado se presentó en el Hotel Plaza la colección póstuma de Jorge Ibáñez, titulada Desde el cielo. Con motivo de compartir lo que fue el evento, Verónica Lozano y Leo Montero invitaron a AM a Mabel, madre del diseñador.
"Desde que Vero entraba al atelier era una risa, los dos. Ella era un cascabel, su sonrisa, su forma de hablar… y Jorge, feliz", contaba Mabel, mientras Vero se quebraba en llanto y deslizaba: "Yo no puedo creer que no esté más".
"El desfile fue una maravilla. Una organización... Conmovedor, divino todo. Los vestidos de Jorge son joyas", describió la conductora obteniendo como respuesta una sonrisa de conformidad de Mabel. Y, pese a que la charla fue nostálgica todo el tiempo, las lágrimas no pudieron evitarse. Cuando la madre de Ibáñez recordó la relación de su hijo con Lozano, ella no contuvo su dolor.
"Desde que Vero entraba al atelier hasta que salía, era una risa, los dos. Ella era un cascabel, su sonrisa, su forma de hablar… y Jorge, feliz", contaba Mabel, mientras Vero se quebraba en llanto y deslizaba: "Yo no puedo creer que no esté más".
"Yo tampoco, tengo mucho dolor", respondió, y sumó, citando un fragmento de una lectura que la remitió directamente a su hijo: "El libro Sabiduría, antiguo testamento, capítulo 4to. trata la muerte prematura del justo y es lo que le pasó a Jorge. Vivió muchos años en poco tiempo. Dios lo trasladó porque era tan inteligente que temía que los pecadores le nublen su inteligencia y su forma de ser".
¡Un recuerdo siempre presente!