A pesar deA pesar de tener sólo 19 años, Bárbara Vélez se convirtió en el bastón de Nazarena. Es su hija quien la aconseja y quien le pide que tome fuerzas para salir adelante, al tiempo que toda la familia se unió con el objetivo de sacarla del hondo dolor. Aún así, desde el sorpresivo suicidio de Fabián Rodríguez, el último 24 de marzo, ya nada fue igual para ellas.
A pesar de tener sólo 19 años, Bárbara Vélez se convirtió en el bastón de Nazarena. Es su hija quien la aconseja y quien le pide que tome fuerzas para salir adelante, al tiempo que toda la familia se unió con el objetivo de sacarla del hondo dolor. Aún así, desde el sorpresivo suicidio de Fabián Rodríguez, el último 24 de marzo, ya nada fue igual para ellas.
"Pensé que ese mail de Fabián era como pasa en las películas, que amenazan con quitarse la vida, para volver a una relación. Jamás lo vi posible. Entonces fui a la oficina, con mi auto, volando, y ahí me dieron la noticia", recordó Barbie, y debió interrumpir el móvil.
Tras dos meses de casi hermético silencio y esquivando la exposición mediática, la joven actriz de Somos familia, habló por primera vez en un conmovedor móvil para Intrusos, mano a mano con Jorge Rial: “Mi mamá está sostenida por una familia que, por suerte, es increíble. También es cierto que yo asumí una responsabilidad que no me correspondía. Uno no sabe cómo manejarse. Yo sentí que debía protegerla como si fuese mi bebé, porque mi mamá es mi vida. Capaz que me tuvo que poner un freno, recordarme que tengo 19 años…Yo también me tenía que recuperar”, arrancó diciendo con una admirable fortaleza.
Pero con el correr de los minutos, Bárbara invevitablemente se quebró al recordar cómo fue el momento en el que tuvo que transmitirle a Nazarena la peor noticia. Al repasar mentalmente ese día, no pudo evitar las lágrimas: "Sí, me tocó a mí decirle. Ella me reenvió el mail que le mandó Fabián y me pidió que lo buscara. Empecé a llamar a sus hijos, a Camila y a Lucas, para ver a dónde estaba, pero no me contestaban. Después me llama un productor de Jaz Producciones y me dice que habían intentado forzar una cerradura de la oficina, yo jamás lo asocié con Fabián, porque para mí era totalmente increíble, jamás lo hubiese imaginado. Pensé que ese mail era como pasa en las películas, que amenazan con quitarse la vida, para volver a una relación. Jamás lo vi posible. Entonces fui a la oficina, con mi auto, volando, y ahí me dieron la noticia. Esperé un tiempo, porque mi mamá estaba por tomarse el avión. No sabía si decírselo, no sabía qué hacer, qué era lo mejor. Calculé el tiempo y se lo dije". En ese instante, Barbie rompió en llanto y debieron hacer una pausa en la nota de cinco minutos.
"Me duele más verla en la cama, llorando, escuchando la música que era de Fabián que viéndola que está saliendo y poniéndole pilas a la vida”, reconoció en alusión a la primera presentación televisiva de Nazarena, en el ciclo de Mirtha Legrand.
Esta no es la única tragedia que le tocó afrontar a la productora, el hecho de perder violentamente a su hermana Jazmín, en un accidente de tránsito en abril de 2010, la desmoronó anímicamente. Pero el tiempo pasó y logró volver a empezar, con energía y -sobre todo- pasión por su trabajo, clave para salir adelante. Por estos días, ante este nuevo golpe, está de rodillas. “Siempre nos ha tocado ser una el sostén de la otra. Siempre que mi mamá me necesite, estoy. Nos han tocado vivir muchas situaciones malas”, repasó Barbie.
Y sumó: “No me hace bien ver a mi mamá sufrir. Mi mamá sufrió una tragedia increíble. Pero ahora tiene que salir a trabajar, para pagar las deudas, las cosas de la casa… Me duele más verla en la cama, llorando, escuchando la música que era de Fabián que viéndola que está saliendo y poniéndole pilas a la vida”, reconoció en alusión a la primera presentación televisiva de Nazarena, en el ciclo de Mirtha Legrand
A pesar de tener sólo 19 años, Bárbara Vélez se convirtió en el bastón de Nazarena. Es su hija quien la aconseja y quien le pide que tome fuerzas para salir adelante, al tiempo que toda la familia se unió con el objetivo de sacarla del hondo dolor. Aún así, desde el sorpresivo suicidio de Fabián Rodríguez, el último 24 de marzo, ya nada fue igual para ellas.
"Pensé que ese mail de Fabián era como pasa en las películas, que amenazan con quitarse la vida, para volver a una relación. Jamás lo vi posible. Entonces fui a la oficina, con mi auto, volando, y ahí me dieron la noticia", recordó Barbie, y debió interrumpir el móvil envuelta en llanto.
Tras dos meses de casi hermético silencio y esquivando la exposición mediática, la joven actriz de Somos familia, habló por primera vez en un conmovedor móvil para Intrusos, mano a mano con Jorge Rial: “Mi mamá está sostenida por una familia que, por suerte, es increíble. También es cierto que yo asumí una responsabilidad que no me correspondía. Uno no sabe cómo manejarse. Yo sentí que debía protegerla como si fuese mi bebé, porque mi mamá es mi vida. Capaz que me tuvo que poner un freno, recordarme que tengo 19 años…Yo también me tenía que recuperar”, arrancó diciendo con una admirable fortaleza.
Pero con el correr de los minutos, Bárbara inevitablemente se quebró al recordar cómo fue el momento en el que tuvo que transmitirle a Nazarena la peor noticia. Al repasar mentalmente ese día, no pudo evitar las lágrimas: "Sí, me tocó a mí decirle. Ella me reenvió el mail que le mandó Fabián y me pidió que lo buscara. Empecé a llamar a sus hijos, a Camila y a Lucas, para ver a dónde estaba, pero no me contestaban. Después me llama un productor de Jaz Producciones y me dice que habían intentado forzar una cerradura de la oficina, yo jamás lo asocié con Fabián, porque para mí era totalmente increíble, jamás lo hubiese imaginado. Pensé que ese mail era como pasa en las películas, que amenazan con quitarse la vida, para volver a una relación. Jamás lo vi posible. Entonces fui a la oficina, con mi auto, volando, y ahí me dieron la noticia. Esperé un tiempo, porque mi mamá estaba por tomarse el avión. No sabía si decírselo, no sabía qué hacer, qué era lo mejor. Calculé el tiempo y se lo dije". En ese instante, Barbie rompió en llanto y debieron hacer una pausa en la nota de cinco minutos.
"Me duele más verla en la cama, llorando, escuchando la música que era de Fabián que viéndola que está saliendo y poniéndole pilas a la vida”, reconoció en alusión a la primera presentación televisiva de Nazarena, en el ciclo de Mirtha Legrand.
Esta no es la única tragedia que le tocó afrontar a la productora, el hecho de perder violentamente a su hermana Jazmín, en un accidente de tránsito en abril de 2010, la desmoronó anímicamente. Pero el tiempo pasó y logró volver a empezar, con energía y -sobre todo- pasión por su trabajo, clave para salir adelante. Por estos días, ante este nuevo golpe, está de rodillas. “Siempre nos ha tocado ser una el sostén de la otra. Siempre que mi mamá me necesite, estoy. Nos han tocado vivir muchas situaciones malas”, repasó Barbie.
Y sumó: “No me hace bien ver a mi mamá sufrir. Mi mamá sufrió una tragedia increíble. Pero ahora tiene que salir a trabajar, para pagar las deudas, las cosas de la casa… Me duele más verla en la cama, llorando, escuchando la música que era de Fabián que viéndola que está saliendo y poniéndole pilas a la vida”, reconoció en alusión a la primera presentación televisiva de Nazarena, en el ciclo de Mirtha Legrand.
Y sumó: “No me hace bien ver a mi mamá sufrir. Mi mamá sufrió una tragedia increíble. Pero ahora tiene que salir a trabajar, para pagar las deudas, las cosas de la casa… Me duele más verla en la cama, llorando, escuchando la música que era de Fabián que viéndola que está saliendo y poniéndole pilas a la vida”, reconoció en alusión a la primera presentación televisiva de Nazarena, en el ciclo de Mirtha Legrand tener sólo 19 años, Bárbara Vélez se convirtió en el bastón de Nazarena. Es su hija quien la aconseja y quien le pide que tome fuerzas para salir adelante, al tiempo que toda la familia se unió con el objetivo de sacarla del hondo dolor. Aún así, desde el sorpresivo suicidio de Fabián Rodríguez, el último 24 de marzo, ya nada fue igual para ellas.
"Pensé que ese mail de Fabián era como pasa en las películas, que amenazan con quitarse la vida, para volver a una relación. Jamás lo vi posible. Entonces fui a la oficina, con mi auto, volando, y ahí me dieron la noticia", recordó Barbie, y debió interrumpir el móvil.
Tras dos meses de casi hermético silencio y esquivando la exposición mediática, la joven actriz de Somos familia, habló por primera vez en un conmovedor móvil para Intrusos, mano a mano con Jorge Rial: “Mi mamá está sostenida por una familia que, por suerte, es increíble. También es cierto que yo asumí una responsabilidad que no me correspondía. Uno no sabe cómo manejarse. Yo sentí que debía protegerla como si fuese mi bebé, porque mi mamá es mi vida. Capaz que me tuvo que poner un freno, recordarme que tengo 19 años…Yo también me tenía que recuperar”, arrancó diciendo con una admirable fortaleza.
Pero con el correr de los minutos, Bárbara invevitablemente se quebró al recordar cómo fue el momento en el que tuvo que transmitirle a Nazarena la peor noticia. Al repasar mentalmente ese día, no pudo evitar las lágrimas: "Sí, me tocó a mí decirle. Ella me reenvió el mail que le mandó Fabián y me pidió que lo buscara. Empecé a llamar a sus hijos, a Camila y a Lucas, para ver a dónde estaba, pero no me contestaban. Después me llama un productor de Jaz Producciones y me dice que habían intentado forzar una cerradura de la oficina, yo jamás lo asocié con Fabián, porque para mí era totalmente increíble, jamás lo hubiese imaginado. Pensé que ese mail era como pasa en las películas, que amenazan con quitarse la vida, para volver a una relación. Jamás lo vi posible. Entonces fui a la oficina, con mi auto, volando, y ahí me dieron la noticia. Esperé un tiempo, porque mi mamá estaba por tomarse el avión. No sabía si decírselo, no sabía qué hacer, qué era lo mejor. Calculé el tiempo y se lo dije". En ese instante, Barbie rompió en llanto y debieron hacer una pausa en la nota de cinco minutos.
"Me duele más verla en la cama, llorando, escuchando la música que era de Fabián que viéndola que está saliendo y poniéndole pilas a la vida”, reconoció en alusión a la primera presentación televisiva de Nazarena, en el ciclo de Mirtha Legrand.
Esta no es la única tragedia que le tocó afrontar a la productora, el hecho de perder violentamente a su hermana Jazmín, en un accidente de tránsito en abril de 2010, la desmoronó anímicamente. Pero el tiempo pasó y logró volver a empezar, con energía y -sobre todo- pasión por su trabajo, clave para salir adelante. Por estos días, ante este nuevo golpe, está de rodillas. “Siempre nos ha tocado ser una el sostén de la otra. Siempre que mi mamá me necesite, estoy. Nos han tocado vivir muchas situaciones malas”, repasó Barbie.
Y sumó: “No me hace bien ver a mi mamá sufrir. Mi mamá sufrió una tragedia increíble. Pero ahora tiene que salir a trabajar, para pagar las deudas, las cosas de la casa… Me duele más verla en la cama, llorando, escuchando la música que era de Fabián que viéndola que está saliendo y poniéndole pilas a la vida”, reconoció en alusión a la primera presentación televisiva de Nazarena, en el ciclo de Mirtha Legrand