Antes que lamentar que Moria Casán y Carmen Barbieri dieron por finalizada su sociedad artística con polémica, hay que destacar la pacífica convivencia que mantuvieron durante dos años. Pero todo eso forma parte del pasado.
LA PALABRA DE CARMEN
La primera en hablar en Intrusos fue la ex de Santiago Bal, que intenta que la obra continúe en cartel: "Brillantísima se llama Brillantísima con humor, no con Moria. No voy a permitir que se levante Brillantísima porque no se puede dejar 45 personas sin trabajo".
A continuación, sus frases más salientes:
Carmen Barbieri: "No entiendo cómo se fue. Moria nunca renuncia ni deja un espectáculo por la mitad, ni deja tanta gente sin trabajo. Tengo una socia genial, la admiro y la respeto. No la odio, como dicen".
-"Le dije a la producción que yo me bajaba del escenario, porque no quería compartir elenco con estas señoritas. No quiero compartir escenario con esta gente. Me dijeron que de ninguna manera. Toman la decisión de suspenderla o el contrato ya terminaba. Esto es decisión de Javier Faroni. No me aceptan salir del escenario y solamente dirigir para no dejar sin trabajo a nadie. Porque nos va muy bien y nos va a seguir yendo bien".
-"Puede hacerse tranquilamente con Carmen Barbieri, Tristán y una primera vedette que en dos días aprende la coreografía. Nada de lo que hacían las señoritas estas… Es gente que estuvo en el Bailando. Se va a debutar en unos días. No se va a quedar nadie sin trabajo".
-"¿Por qué se baja Moria? No entiendo cómo se fue. Moria nunca renuncia ni deja un espectáculo por la mitad, ni deja tanta gente sin trabajo. Tengo una socia genial, la admiro y la respeto. No la odio, como dicen. Para odiar a alguien, se la tiene que querer mucho y yo no la quise mucho como para odiarlo. La respeto y me encanta trabajar con ella.
Moria Casán: "Lo que me extraña es que con semejante elenco, la señora Barbieri, el señor Sergio Denis, levanten la revista porque me voy yo y las griegas. Si es la revista de ellos. El señor Denis corta tickets y el gran ballet de mujeres hermosas que tiene, también".
-"Habla de mi sobrepeso, ah pensé que hablaba del de ella. Las dos tenemos sobrepeso. Por eso, andamos mal de la rodilla. Ella tiene artrosis en una rodilla por el sobrepeso. Nunca se iba a echar a Vicky, se habló de suspenderla. Fue una decisión mía que tomé en tu programa, a Moria le molestó y yo le pedí disculpas por no consultárselo. Me enteré que ella había dicho que si la suspendían en el debut, ella no seguía".
-"No, no voy a hablar con Moria porque si me ven algo de enojo es porque no voy a permitir que alguien como Moria, que es lo más grande que tenemos, deje a 45 personas sin trabajo. No lo voy a permitir. No hago responsable a nadie. No voy a permitirlo porque yéndose me deja a mí con toda la responsabilidad. Es lo único que me enoja, no con Moria, sino con la situación... A mí me encantaría trabajar con Moria de vuelta, capaz que ella no querría".
-"¡Gracias, Moria! Sin ella, no soy nadie. Vení Moria, sería una gran satisfacción para los compañeros que te quieren mucho. Algunos estaban llorando. Te espero, mañana tenemos ensayo... Pregúntenle a ella por qué se va. Hubo gente que destapó champagne… en broma. ¡No yo! Me mandan mensajes de texto que dicen ‘vamos a brindar con champagne’".
-"Me llamó Javier Faroni para decirme que se bajaba Moria y para decirme que levantaba el espectáculo. Yo ahí le dije que no", contó Carmen. Quien además apeló al sarcasmo vía Twitter: "¿Ah está libre? ¿Puede ir a Paraguay? Si no puede salir del país, ¡no está libre!".
LA RESPUESTA DE MORIA
A su turno, Moria reveló el malestar que acarreaba con su socia: “Nunca lo hablé con Carmen, pero me sentí mal de que Carmen prácticamente no asistió a los ensayos de Sorpresas, porque era mi laburo (obra que finalmente se levantó de la plaza marplatense). Carmen tenía mucho trabajo en ese momento, tenía Tu Cara me Suena y todo, no pudo asistir a muchos ensayos. Había cosas que venían mal manejadas desde el verano y nunca se hablaron”.
Luego, matizó con elogios a su colega: “Creo que somos las dos únicas mujeres del planeta que hacemos dos obras al mismo tiempo, por la capacidad de laburo. Así llegamos hasta acá, y la verdad que yo nunca más tuve una reunión ni con Javier Faroni ni con Carmen Barbieri, de nada. La última reunión la tuvimos en Mar del Plata. Ahí dijo que las únicas que no podían faltar en Magníficas para 2015 eran las griegas, porque ninguna de las otras garantizaba esa cosa explosiva. Si la revista no es virtuosismo, es más carisma. Hacemos un genero glamoroso que se vende alegría. Creo que a partir de ahí hay una bronquita interna de Carmen, que nunca hablé con ella. Aseguro que el señor Faroni, al principio se habrá resisitido, pero después dijo que no podían faltar las griegas. Por lo menos aprovechemos la publicidad de las chicas. Además, han avanzado de una manera impresionante, cantan, bailan, actúan”.
Aunque a la hora de responder sobre las críticas de Carmen respecto de la alteración de Brillantísima, Moria precisó: “El cuadro lo armé yo, nunca duró 30 minutos. Eso es una terrible mentira y una falta de respeto a mi persona. Dura como mucho 20 minutos, nada más que trabajo 4 veces, cuatro cambios de vestuario para que la gente vea algo más Hago un stand up y un monólogo. Lo otro que hago son los 10 minutos del principio con Carmen Barbieri, y el final. Nunca voy a pasar por encima de alguien. Si una persona es directora y yo soy asesora artística, un título que me dio Faroni y nunca pedí… No necesito que me mimen con títulos. Yo no soy ocupa. Si mi nombre figura en la cartelera es porque la gente saca una entrada para verme. Es la primera vez que todo nace de mí”.
Ya sin pelos en su lengua karateka, la diva disparó: “Si te digo todas los malestares que tenía, teníamos que hacer la obra en el Hospital Fernández, era la Armada Brancaleone. Tenía un tumor en la muñeca, la ciática, la rodilla, el tobillo. No sé todo lo que tenía, era el Vademecum… Entonces, yo propuse que Carmen haga de Cenicienta, pero no quería limpiarme los pies. Tampoco quiso ser Blancanieves. Por eso, para que haga algo más, su nombre figure en la cartelera y la gente no siga diciendo que no trabaja, aparecería como directora que mira en bata desde el costado del escenario… A ella no le gustaba el sketch. Eso fue mi rol okupa, mi intervención. Pero si un espectáculo dice Moria Casán y Carmen Barbieri, hay que trabajar en el escenario”.
En cuanto al conflicto puntual, reveló: “Yo tengo la mejor con Carmen en escena, estoy teflonizada, esto no me afecta. Me parece que las cosas no van, teníamos que renovar el contrato y le dije que renunciaba. No me dan ganas de ir al teatro si las cosas no están armonizadas. Lo que me extraña es que con semejante elenco, la señora Barbieri, el señor Sergio Denis, levanten la revista porque me voy yo y las griegas. Si es la revista de ellos. El señor Denis corta tickets y el gran ballet de mujeres hermosas que tiene, también”.
Al final, sentenció lapidaria: “Las griegas no hacen nada. Es la única revista en que la primera vedette no habla, porque le propuse a Carmen que haga algo más, ahora canta dos tangos. ¿Dijo que me manejaban las griegas? Sí, yo soy un taxi, me maneja cualquiera. Saben de mi endeble personalidad y bajo perfil. Carmen dirá eso porque tiene algunos idas y vueltas con su pensamiento”.