Es uno de los galanes de la televisión, trabaja desde los 10 años y actualmente protagoniza Mis amigos de siempre, por El Trece.
"¿Si veo todo los días a mi hija? Sí. Rufina es de otro planeta. Tiene cosas de los dos. Es una beba feliz, se ríe desde que se despierta hasta que se duerme y te permite hacer absolutamente cualquier cosa. Con 5 meses, ya no toma teta, se viene conmigo y va a comer con mis amigos y nos vamos a dormir juntos".
Pero Nicolás Cabré (34) no sólo es uno de los actores más importantes de su generación, sino también uno de los muchachos más codiciados y polémicos. Hace 7 meses fue papá por primera vez junto a la China Suárez (21), de quien está separado, y en una nota con la revista El Planeta Urbano habló más sobre su nueva etapa.
"La paternidad me impactó bien, me cambió la vida. Nunca había sostenido a un bebé, y de repente me dieron a Rufina y la tuve que agarrar. Es darte cuenta que esa personita depende de vos y que tenés que incentivarla y estar. Ahora ¿cuándo dije soy papá? No sé si lo tengo tan claro, teniéndola en brazos ya te cambia todo", reflexionó Cabré con la periodista Tatiana Schapiro.
"¿Si veo todo los días a mi hija? Sí. Rufina es de otro planeta. Tiene cosas de los dos. Es una beba feliz, se ríe desde que se despierta hasta que se duerme y te permite hacer absolutamente cualquier cosa. Con 5 meses, ya no toma teta, se viene conmigo y va a comer con mis amigos y nos vamos a dormir juntos. La veo todos los días. No tiene vuelta, es muy simple, no llora, se ríe, es feliz. Le cambio los pañales, pero si puedo evitar el de la caca lo evito (risas). Hago la vista gorda ahí. Si se lo puede fumar otro, que se lo fume el otro".
"Tengo la suerte de haberme cruzado a La China y que sea la madre de mi hija. Agradezco todos los días tener la relación que tengo con ella"
Nicolás detalló: "Te cambian las prioridades, te das cuenta que dejaste de ser el centro del mundo, levantas la vista y te cambia todo. La mirada hacia los otros; mi papá es abuelo, mi hermano tío. Fue muy importante ver la vida o la felicidad de mis viejos, ver a La China mamá. Te cambia todo. Tengo la suerte de haberme cruzado a La China y que sea la madre de mi hija. Agradezco todos los días tener la relación que tengo con ella, decidimos separarnos pero nos vemos todos los días, nos llevamos bien, podemos reírnos juntos. De lo que pase el día de mañana, no tengo la menor idea. El hoy marca eso, siempre fuimos sinceros, y de verdad creo que es preferible a veces parar las cosas y no romperlas por un capricho, por algo que está impuesto por la sociedad, o por decir: 'Uy, si nos separamos me matan'".
Cabré, el eterno chico anti-prensa
A contramano de los que sucede con muchos actores, a Nicolás no le gusta la prensa. En otras palabras: no le gusta sentirse obligado a responder sobre lo que no quiere hablar y no forma parte del “juego mediático”.
Consultado sobre esto, Cabré respondió: “Hay un estereotipo de que te ponen el micrófono y tenés que hacerte el gracioso. Hay un estilo de periodismo en el que vos tenés que remar la nota. A mí vienen ahora y se me hacen los graciosos, no voy a decir quién, pero te preguntan algo y te hacen un personaje de que no te escuchan, no me interesa eso. Y si vos no te prendés en eso sos un hijo de puta”. Y agregó: “También hay una cosa del actor de querer caer simpático en todos lados. Y no, hay gente que me cae mal y gente que no me cae mal”.
Sobre Jorge Rial comentó que no cruzaría de vereda porque “no le importa” y fue contundente. “Por mi manera de haber sido educado y por cómo me manejo en la vida, que alguien como Rial o muchos de esos bocones hable mal de mí, habla bien de mí”.
Las críticas a su profesión tampoco le quitan el sueño. “Yo estreno una película y sé que la crítica va a estar mal. Te puedo decir lo que van a poner. Si me cruzo con el periodista en cuestión le preguntaría un par de cosas”, desafió.
“¿Se baña todos los días?”, consultó la periodista. “No, los meses que no tienen R me baño (risas). Por eso digo, no es algo que me quite el sueño”, bromeó él sobre estas versiones.
Relajado y con humor
Una de las tantas cosas que dicen de Cabré es que es sucio, o que tiene aspecto de sucio. El lo sabe, y lo mencionó. “Yo voy a mi casa y mi mamá para bien o para mal no me pregunta, sabe lo que puedo llegar a contestar. O si me dicen sucio, ¿saben cuántas veces me lavo las manos?”.
La periodista repreguntó: “Nicolás Cabré es sucio?”. “Si, soy muy sucio (risas)”. “¿Se baña todos los días?”, consultó. “No, los meses que no tienen R me baño (risas). Por eso digo, no es algo que me quite el sueño”, bromeó él.
Como para que queden dudas sobre su posición en el mundo de la farándula, con un pequeño ejemplo, el actor dejó en claro qué piensa y cómo ve las cosas. “A veces cuando estás en un restaurant y te cruzás con un actor al que tal vez no viste nunca en tu vida hay una obligación de saludar y decirle cómo estás. Mi papá es taxista, si se tiene que saludar con todos los taxistas se le acaba la batería a los dos días de tocar bocina. Hay cosas que son raras”.