Tras diez años de amor, en el verano de 2009, Julieta Ortega e Iván Noble decidieron ponerle punto final al romance. Quedaron los recuerdos, el cariño y lo más importante de sus vidas, su hijo, Benito (8). Las relaciones post separación nunca son fáciles, pero la actriz y el cantante parecen haber encontrado un buen camino para recorrer.
"Nosotros queremos que nuestro hijo crezca lo más contento posible. La única receta es que vea a sus papás respetándose y queriéndose".
Tiempo atrás, Julieta e Ivan sorprendieron con una muy graciosa charla radial llena de divertidas chicanas en las que dejaron en claro lo importante de un buen diálogo entre ex. “Nosotros queremos que nuestro hijo crezca lo más contento posible. Por supuesto que va a quedar alguna cicatriz, alguna herida. Pero la única receta es que vea a sus papás respetándose y queriéndose. Siempre que nos ve juntos tiene ganas de que estemos juntos”, confesó el músico. Por su parte, la actriz relató que cada vez que Benito los ve juntos, les pide un “abrazo de familia”.
Noble y Ortega compartieron en Twitter e Instagram varias postales de la dinámica familiar. Relax, literatura, asado y mucho fútbol. El pequeño Benito es un fanático de la redonda y aprovecha el gran parque de la casa de su papá para despuntar el vicio sin importar las altas temperaturas. “35° a la sombra. ¿Adiviná qué va a ser tu hijo cuando sea grande @ortegajuli?”, escribió Iván en una foto que muestra la destreza del pequeño haciendo jueguito.
Benito heredó de su papá la pasión por la camiseta de Boca y si bien se destaca con la pelota en los pies, a veces le toca ir al arco. “Y sí, cuando no hay arquero, va un rato cada uno. Ya lo dicen los Stones hijo, you can't always get what you want...”, bromeó Noble citando la famosa canción de los Rolling Stones.