Las incursiones de Jésica Hereñú (30) en Perú se volvieron moneda corriente. La despampanante morocha, que saltó a la fama por su estadía en la casa de Gran Hermano 2011, cautivó al público del país sudamericano de tal manera que sus visitas a tierras incas se acumulan con el paso del año. Durante 2013 ya viajó tres veces, y proyecta una cuarta travesía para septiembre.
Las imágenes que acompañan esta nota pertenecen a una (muy) sensual producción de fotos que Jésica hizo en un conocido spa peruano. Allí, la bomba sexy (que está soltera), triunfa con actos de presencia en boliches, publicidades y hasta en televisión.
Madre de un chico de 10 años, Hereñú conserva una figura escultural que mantiene a base de ejercicios y dieta sana, y seduce a todos a su paso.
Una belleza de exportación.