"No, no me siento la dueña del canal, no le sugiero nada a Daniel (Vila). Esta cosa de decir a medias la verdad u omitirla es también mentir", dijo Pamela.
La tormenta se desató en noviembre de 2012, cuando Pamela David (pareja de Daniel Vila, dueño del canal América) reveló el supuesto motivo oculto por el cual Mirtha Legrand no volvía con sus famosos almuerzos. “Pidió 800 mil pesos por mes. Yo si los tuviera los pago, pero no se gana eso en América. Los re vale, pero no hay", había afirmado la modelo.
A los pocos días, Mirtha salió a cruzar los dichos de Pamela, muy enojada. “Estuvo fuera de lugar. Además, era una cifra que jamás hablé con Vila. Nunca hablé de dinero. Es un momento que no hay que hablar de dinero y menos en televisión. Sufrí mucho”, respondió la diva.
El reencuentro se produjo en el segundo programa del 2013 de la “Chiqui” y no tuvo desperdicio. Mirtha y Pamela resolvieron sus diferencias y se sacaron chispas en vivo. “¿Te sentís la dueña del canal? ¿Le sugerís cosas? Contratala a la Legrand, no la contrates, mirá que pide mucho”, comenzó la conductora.
“La cifra que dijiste no era mi chachet, no era mi sueldo. No me hagas esa carita porque es verdad, te estoy mirando a los ojos y te estoy diciendo la verdad", dijo Mirtha.
Pamela no se achicó. “¿Quiere hablar de eso? No, no me siento la dueña del canal, no le sugiero nada. Nosotros vimos juntos la entrevista que le hizo Beto Casella a usted. Y no es lindo o cómodo cuando usted deja a pensar y dice: ‘¿No sé por qué no me contratan?’. Si usted sabe que es por los números, si no da a pensar que si el canal es K o no es K”, argumentó David.
Mirtha dio su versión. “Pero no eran los número exactos, yo no los había dicho, era toda una producción y no era mi chachet, no era mi sueldo”, aclaró la Chiqui, pero se ve que la explicación no convenció mucho a Pamela, que hizo muecas a la cámara.
“No me hagas esa carita porque es verdad, te estoy mirando a los ojos y te estoy diciendo la verdad. La suma era esa, pero no era para Chiqui Legrand”, reafirmó Mirtha. Para bajar un poco los decibeles, David concluyó: “Como para cerrar, mi intención no era atacarla, fue desafortunado dar una cifra. Pero mi explicación era esa. Esta cosa de decir a medias la verdad u omitirla es también mentir”, remató.