Pasear en traje de baño por un shopping y subir fotos hot a su Twitter son sólo algunas de las cosas con las que Rihanna erigió un perfil siempre ligado a la polémica. Esta vez, la bellísima cantante volvió a sorprender con unas sensuales y descontroladas imágenes durante una fiesta en su Barbados natal.
La artista participó de un tradicional festival que se realiza en la isla, el Crop Over Festival, que marca el fin de la cosecha de la caña de azúcar. Rihanna se mostró muy desinhibida (como siempre) y lució una sensual trikini blanca con detalles plateados y transparencias, y unas gafas oscuras color celeste.
En la mayoría de las fotos, publicadas en el sitio estadounidense TMZ, se puede ver a la joven artista bailando siempre aferrada a un vaso de bebida e, incluso, muy cariñosa con otras mujeres. Y bueno, la alegría de regresar al hogar siempre aflora con fuerza en el corazón.