Lo suyo no fue una explosión fortuita, sino el resultado de la construcción de una carrera de más de dos décadas en los medios, que lo ha llevado a trabajar en las trincheras de la gráfica, la radio y la televisión. Alberto "Beto" Bautista Casella se crió pateando las calles de Haedo y nunca imaginó que a los 53 años sería una figura de la pantalla chica, con cuatro nominaciones al Martín Fierro como Mejor Conductor de aire por su labor en Bendita (2008, 2009, 2010 y la actual por 2012) y tres estatuillas en sus vitrinas: una por Mejor Periodístico en TV abierta a Bendita (2010), otra por Mejor Periodístico en cable a Mundo Casella (2011) y una más como conductor en cable (Mundo Casella, 2010).
"En tanto mantenés el fulbito semanal desde los 17 años y la misma frecuencia sexual, estás bien. Los cincuentones seguimos siendo rockeros".
“Ni en pedo me veía así. Cuando estudiaba Periodismo, quería firmar una notita y que salga mi nombre, nada más. Todo lo demás que vino es yapa”, confiesa el también frontman de Buenos Muchachos, el ciclo en el que comanda un crisol de estrellas como Cacho Castaña, Bambino Veira, Guillermo Coppola y Coco Basile, por C5N.
Pero si bien Beto afirmará sentirse reconciliado con su costado famoso y responderá a cada pedido de foto con una sonrisa amable, sus gestos, ademanes y silencios durante la entrevista desnudarán un dejo de cierta incomodidad. Verse del otro lado del espejo no le gusta demasiado. “No suelo hablar de mi familia, siempre me preguntan por la televisión”, se justificará al final del encuentro.
Luego de una extensa charla en "el bar de enfrente" de Pop Radio, donde conduce el exitoso Bien Levantado (lunes a viernes de 9 a 13 horas), Casella insistirá en hacerse cargo de la cuenta y se despedirá cordial. Pero antes recorrerá una hora de charla, en la que abrirá las puertas de su intimidad y hablará de la mujer que lo acompaña desde hace 25 años, de sus hijos, Franco y Juan Pablo, del miedo a la muerte, de la infidelidad y hasta del juego de seducción que tiene con la panelista de Bendita, Edith Hermida.
-¿Te preocupa el paso del tiempo?
"No suelo hablar de mi familia. Mis hijos son lo más importante que me pasó en la vida. Y mi mujer siempre fue un pilar fuerte desde un lugar no expuesto: ella tiene su laburo y su crecimiento profesional por otro lado así que no ha sido una mujer frustrada".
-No le doy mucha bola, me parece que tener siempre talle 32 de jeans te convierte en esos boludos que se creen que son unos pibes. En tanto mantenés el fulbito semanal desde los 17 años y la misma frecuencia sexual, estás bien. Los cincuentones seguimos siendo rockeros. No tengo problema en asumir mi edad, a mí me dan ganas de ponerme esta campera (color azul eléctrico) y no un saco, los detesto, tiene que ver con la personalidad de uno. Siempre fui medio cachivache para vestirme, me diseñaba una campera de cuero y le cambiaba los puños. La pilcha siempre fue un tema al que le di bola. Yo, cero cremas y mariconadas tipo reductoras, anti age o anti arrugas. Ni me maquillo para hacer tele.
-Con tanto trabajo, ¿qué lugar ocupa la familia?
-Siempre fue un pilar y lo más importante que me pasó fueron mis dos hijos. Hoy son mi principal ocupación y preocupación. Son lo más importante que hice en la vida.
-¿Cómo viven ellos tu fama?
-Se los ve bastante amigados con el tema. A veces me paran para hacer una foto, ellos siguen caminando y yo después lo alcanzo. No parecen conmoverse con eso, no creo que sea tema de terapia para ellos. Además, yo no jodo a nadie, no soy (Eduardo) Feinmann o (Jorge) Lanata, que están expuestos de una manera muy fuerte. La verdad, compadezco al que le tocó laburar en un medio muy oficialista o muy opositor.
"La infidelidad es inherente al género humano, tanto hombres como mujeres. Más mujeres que hombres...".
-¿Sos de resguardar a la familia?
-Nunca fue un plan de resguardo, siempre fue una familia de perfil bajo la mía. Mi esposa no me acompañó a demasiadas ceremonias de Martín Fierro, aunque ha venido a algunas. Ella siempre fue un pilar fuerte desde un lugar no expuesto, ella tiene su laburo y su crecimiento profesional por otro lado así que no ha sido una mujer frustrada.
-¿Y el amor qué lugar ocupa?
-El amor a los 50 no es lo mismo que a los 20 y los 30. Es más apacible, más tranquilo. Los tipos de mi generación nos casamos con la consigna de formar una familia y tener hijos. Eramos unos brutos que no nos enamorábamos, pero bueno, demasiado lejos hemos llegado.
"No me incomoda que las mujeres se me tiren en la calle, no es un problema con mi esposa. Los hombres también se me lanzan mucho. Lo curioso es que vienen por el lado del amor".
-¿Hace cuánto están juntos con tu esposa? No sos de hablar mucho de ella públicamente...
-Nunca le di bola al tema. A la mayoría que está en el medio, no le conozco la mujer y la familia. Nunca fui de hacer la fotito en la playa con la palita y los pibes. Estamos juntos hace 24 ó 25 años. No somos de fijarnos mucho en fechas.
-¿Y en la calle las mujeres se te tiran mucho? ¿Es un problema con ella?
-No, no es un problema. A mí no me incomoda. Algunas vienen a la puerta de la radio o mandan mails, pero como les pasa a Guillermo Andino o Gerardo Rozin, no mucho más. Es aburrida mi vida sexual.
-¡Pero arrancaste la nota diciendo que mantenés la misma frecuencia sexual que a los 20!
"El amor a los 50 no es lo mismo que a los 20. Es más apacible. Los tipos de mi generación nos casamos con la consigna de formar una familia y tener hijos. Eramos unos brutos que no nos enamorábamos, pero bueno, demasiado lejos hemos llegado".
-Porque se te para, mantenés la misma erección. Pero el hombre de 50 se masturba mucho. El otro día hice una encuesta con tipos de mi edad y les pregunté cuándo había sido la última vez que se habían masturbado. Había desde "hoy" hasta "hace una semana" el que más tiempo hacía.
-¿Crees que se debe al desgaste de una relación de tantos años?
-No, es un juego infantil que el hombre no abandona nunca y sospecho que te acompaña hasta el geriátrico. Los hombres nos paj... mucho, y los famosos por supuesto que también. Cuando era chico y veía famosos en la tele, pensaba que no se hacían la pa... y que tenían mucho sexo. Sin embargo, el sexo de los famosos es tan previsible como el de un metalúrgico.
-Ya que tocás el tema, ¿viste el video hot de Florencia Peña?
-Me pareció aburrido, me aburre ver a dos personas cog... más de medio minuto, sea quien sea. Me parece piola si deciden filmarse, hay que gente a la que le gusta colgarlo en Internet y exhibirse un poco. Y yo los felicito si eso les da cierta intensidad. Me parece perfecto, hay todo un mundo que no vemos de intercambio de parejas, amores ocultos y relaciones clandestinas.
-También se llegó a rumorear sobre una relación clandestina entre vos y Edith...
"El hombre de 50 se masturba mucho y los famosos, por supuesto que también. El sexo de los famosos es tan previsible como el de un metalúrgico".
-Es un juego. Si tuviéramos algo, lo último que haríamos es joder a las 9 de la noche en televisión. El que tiene algo, anda con el culo sucio y ni se le acerca. Es divertido y a la gente parece gustarle mucho, pero nada. Ella es casada, se permite joder de boca como yo. Me divierte que publiquen esas cosas y no salgo a desmentir, me cago de la risa y Edith también.
-¿Y los hombres se te tiran también?
-Seee, se me tiran mucho. Capaz se te acercan con respeto y alguno a los cinco minutos te dice: “Soy gay, me encantás”. Llegan muchas declaraciones amorosas de todas las edades. Lo curioso es que los mensajes no dicen las cosas que me harían, sino que vienen por el lado del amor. Supongo que también les pasa a (Santo) Biasatti y (Alejandro) Fantino, ja, ja, ja. Mirá, al pobre de Fantino le colgaron Luciano Pereyra, el futbolista (Adrián) Bastía y carga con eso. Y bueno, yo cargo con Edith, ja, ja, ja.
-¡A vos te fue mejor!
"Cuando tenés 53 años, pensás que te quedan seis meses por vivir".
-Si, ja, ja, ja. No es que a uno le espante que le inventen un romance homosexual tampoco...
-¿Y la infidelidad?
-La infidelidad es parte de la vida, yo perdonaría. Siempre lo hablamos con Gastón (Recondo), él es más riguroso y yo soy más elástico. No me parece grave, pero hay gente que se separa y gente que perdona. Me parece que es jodido ser infiel con tu cuñada, o con la maestra jardinera de tu pibe, hay escalas. Es inherente al género humano, tanto hombres como mujeres. Más mujeres que hombres...
"Si tuviéramos algo con Edith (Hermida), lo último que haríamos es joder a las 9 de la noche en TV. Es un juego. A la gente parece gustarle mucho, pero nada. Ella es casada, se permite joder de boca como yo. Me divierte que publiquen esas cosas y no salgo a desmentir, me cago de la risa y Edith también".
HOMBRE DE LOS MEDIOS
-Siempre reivindicás tu origen de conurbano, ¿por qué?
-Los comunicadores del conurbano son superiores, tiene un plus contra el muchacho que nació en Callao y Santa Fe. Me parece que los que están funcionando son los que tienen algo de barrio. (Marcelo) Tinelli, de Bolívar, (Santiago) del Moro, (de Tres Algarrobos, provincia de Buenos Aires), (Alejandro) Fantino, de Santa Fe...
-¿Quiénes no te gustan de la tele?
-Tengo cierto reparo con estos que salen de los realities y rápidamente ocupan un lugar. Me parece que es un mensaje chotísimo a los pibes que están estudiando. “Metete en un reality o levantate un gerente porque no hay tiempo de estudiar cuatro años”. Me gustan los conductores populares y todo terreno. Me gustaba Matías Martin, es un desperdicio que no lo llamen, y me parece una locura que Tinelli no esté. Creo que hoy el más completito es Fantino, se va reinventando y va progresando.
-¿Tu sinceridad te trajo problemas?
-Con los que he tenido cruces jodidos son (Gerardo) Sofovich, (Mario) Pergolini y (Chiche) Gelblung, me sobra una mano para contarlos. A Chiche lo respeto profesionalmente, a los otros dos ni siquiera eso porque han vivido del conflicto y no tienen amigos. Son dos tipos sin amigos y reconocido por ellos mismos.
"Con los que he tenido cruces jodidos son Sofovich, Pergolini y Gelblung. A Chiche lo respeto profesionalmente, a los otros dos ni siquiera eso, porque han vivido del conflicto y no tienen amigos. Son dos tipos sin amigos y reconocido por ellos mismos".
-¿Y el conflicto con Daniel Vila?
-Con Vila tuve un problema porque tuvo una actitud cobarde. Hay que ser cobarde para pedir la cabeza de un pibe que está laburando y que no hizo ninguna maldad (N. de la R.: Bendita hizo un informe sobre Pamela David, la esposa del empresario y uno de los dueños de América, que se molestó y derivó en que las autoridades de Canal 9 despidieran al productor general del ciclo, quien un día después fue reincorporado luego de que Casella y su equipo se negaran a salir al aire). Yo había hablado con él por más de media hora y había quedado todo bien, y a mis espaldas fue y pidió la cabeza del muchacho como única condición. Si le tengo que entregar un compañero a un tipo así, no vuelvo más a la tele. Me da pena, ese es el poder de la guita. Te confundís y crees que podés mandar todo y que todos son tus empleados. Capaz él pensó que yo y mi productor éramos sus empleados. Pero una vez, alguien le tiene que hacer frente a ese tipo de poder. Si me tengo que ir a vender libros como lo hice, lo hago, por eso pongo en juego todo. No hay que acorralar a un ariano del oeste, es peligroso.
-¿Sos muy calentón?
-Si, de pibe me agarraba a piñas. Era un boludo, de bajarme del auto a discutir o pelearme en una cancha. Si a los 53 vivís pelándote, estás jodido porque lo más probable es que te rompan el alma. Siempre hay uno más loco que vos.
-¿Sentís que tenés alguna deuda pendiente con la vida y la profesión?
"Me gustaba Matías Martin, es un desperdicio que no lo llamen, y me parece una locura que Tinelli no esté. Creo que hoy, el más completito es Fantino, se va reinventando y va progresando".
-Nada, demasiado, tengo que devolver. Lo único, ver crecer a mis pibes felices y ayudar a mis amigos. Ayudo mucho, eso es muy lindo. Tengo una cosa que llamo la cooperativa, que reparte plata entre mis productores de la tele y de la radio. Se lo merecen, no puedo permitir que alguien que se levantó a las 7 de la mañana como yo gane tres lucas. Si puedo, desde mi lugar, con algún PNT (Publicidad No Tradicional) o desde mi bolsillo voy a tratar de que gane algo más justo. Todos los conductores tendrían que hacerlo por lo que ganan. La mayoría de los conductores de radio ganan más que yo porque soy pésimo para negociar. Tengo una relación de desapego absoluto con la guita, me da asco.
-¿Te da culpa?
-(Se queda en silencio) Nunca lo había pensado... Puede ser que me dé un poco de culpa. Laburo de chiquito, no tuve un padrino ni me acosté con el dueño de un canal para llegar adonde estoy. Pasa más por el desapego, me voy a morir y no me voy llevar un mango. Cuando tenés 53 años, pensás que te quedan seis meses por vivir. La doy, qué mejor destino.
¡No te pierdas el ping pong de Beto Casella sobre sus panelistas de Bendita, en el video de esta nota!