"Tuvimos una diferencia con una grabación, yo lo contraté y no se hizo el disco. Los motivos míos son claros, los de él no tanto... Entonces, nos empezamos a mandar cartas documento. Me puse re contento (dice con ironía), pensé 'este pibe está loco'. Es un pibe que tuvo muchos quilombos. Pobre, el ego de los artistas...".
Algo pasaba entre ellos y era un secreto a voces en los pasillos del Soñando por cantar. La relación entre Oscar Mediavilla y Alejandro Lerner no pasaba por su mejor momento desde hace un tiempo, pero la razón no estaba clara.
Ciudad.com se comunicó con el productor musical y marido de Patricia Sosa, quien habló por primera vez del conflicto y dio detalles sobre la situación que podría terminar con ambos jurados de ciclo musical en un juicio.
-¿Es cierto que mantenés un enfrentamiento legal con Alejandro Lerner?
-Hoy mi abogado habló con el abogado suyo y el hombre va a devolver la plata que tiene que devolver. Tuvimos una diferencia con una grabación, yo lo contraté y no se hizo el disco. Los motivos míos son claros, los de él no tanto... Entonces, nos empezamos a mandar cartas documento. Me puse re contento (dice con ironía), pensé: "Este pibe está loco". Es un pibe que tuvo muchos quilombos. Pobre, el ego de los artistas...
-¿El conflicto se dio mientras convivían en Soñando por cantar?
-Claro. Yo lo llevé al programa. Fue durante el ciclo. Antes, me habían llamado muchos productores para decirme que no me meta ahí. Es un problema de plata, más allá de la angustia y, por otro lado, obviamente no voy a grabar más con él.
-¿Cómo es la convivencia en el programa, entonces?
-A partir de las cartas hablábamos del programa y nada más. Un "¿cómo va?" de parte de los dos y listo. No comparto camarín con él, no quiero estar cerca suyo y a él seguramente le pasará lo mismo. Cuando tengo un problema con alguien, lo charlo. Pero hay gente que cree que es más. Son formas, pobre. Ya no es un tema que me quite el sueño. Es algo que no lo ayuda a él ni tampoco a mí. En toda mi historia nunca tuve un conflicto con ningún artista.
"A partir de las cartas documento hablábamos del programa y nada más. No quiero estar cerca suyo y a él seguramente le pasará lo mismo. Cuando tengo un problema con alguien, lo charlo. Pero hay gente que cree que es más, son formas, pobre".
-¿Cómo se desató el tema?
-Nosotros le habíamos adelantado un montón de dinero, él trajo unas cosas grabadas. De hecho, tengo el disco terminado pero no lo hago porque no me gustaría que me lo hagan a mí. Alguno tiene que devolver algo. Si vos querés quedarte con toda la plata...
-¿Qué decía la primera carta documento que te envió?
-Que le diera la plata que faltaba, y yo no tengo nada que darle porque soy el productor. Me mandó siete cartas. Si vamos a un juicio, es tan claro todo de mi parte que no va a haber problemas.
-Por lo que contás, antes del conflicto tenías una gran relación con Lerner...
-Confiaba porque me parece un gran artista. Lo llevé a Soñando por cantar de onda, porque él no estaba en su mejor momento. Creo en la gente y a veces me sale como el culo. En el medio todos sabemos quién es quién. Todo el tiempo nos volvemos a encontrar.