“Un nuevo ángel en el cielo, se llama Federico Rafael Ribero”, tuiteó Andrea Bursten (40), horas después del último adiós a su marido, el empresario Federico Ribero, quien falleció el 17 de junio, a los 44 años, tras una valiente lucha contra un cáncer de que había hecho metástasis en el pericardio y diafragma, diagnosticado en mayo de 2011.
Con la conmovedora simpleza de los niños, Francesca tuiteó arrobando a su papá: "@RiberoFede ¡Hola, pa! ¡Te extrañamos muchísimo! ¡Espero que seas feliz allá y que no sufras más! ¡Cuidanos mucho! Te amoo ♥". Emocionante.
Seis días después del fallecimiento del gran amigo de Marcelo Tinelli, la ex modelo volvió a usar la red social para agradecer el apoyo de sus allegados más íntimos en este difícil momento. "Gracias Willy, Lore, Fede, Pauli, Yani, Dany, Naty, Nacho, Herni, Carli, Leo, Clau, Vero, Diegui, Marie, Marce, Guille, Fede, Romi, Karin, Mikel, Juan, Dolo. Gracias por el apoyo incondicional, por bancarme, escucharme, acompañarme y por estar siempre. Sin ustedes todo sería aún más difícil. Gracias Lauti, Agus, los quiero", expresó.
Francesca, la hija mayor de la pareja, de 11 años (además tuvieron a Stefano, de 8), también escribió un sentido mensaje en Twitter, que fue replicado por varios famosos que eran amigos de Ribero. Primero le mandó un agradecimiento a Francisco Tinelli, hijo del conductor ("gracias por la buena onda, posta"). Y luego, con la conmovedora simpleza de los niños, le habló directamente a su papá, quien se había sumado a Twitter en febrero de este año, para dar gracias por las muestras de afecto y transmitir esperanza en medio de su tratamiento: Con mención a Federico, escribió: "@RiberoFede ¡Hola, pa! ¡Te extrañamos muchísimo! ¡Espero que seas feliz allá y que no sufras más! ¡Cuidanos mucho! Te amoo ♥". Emocionante.
Andrea Bursten agradeció los mensajes de afecto: "Gracias por el apoyo incondicional, por bancarme, escucharme, acompañarme y por estar siempre. Sin ustedes todo sería aún más difícil".
En mayo de este año, Bursten le había dado una entrevista a la revista ¡Hola! Argentina, en la que se refirió al cuidado personal, pero con un mensaje que fue mucho más allá de la estética. “No siempre lo visible es sólo lo visible, es un reflejo de algo más profundo a veces. Nutrir el espíritu es lo importante”, afirmó cuando le preguntaron por su imagen.
Luego agregó que “lo que se ve es un estado de aprendizaje, de crecimiento, de querer estar bien y feliz, de abrazar la vida y querer disfrutarla, juntos, con Fede y con mis hijos”. Y además se refirió a la meditación, una práctica que ayudó a la pareja a transitar la difícil enfermedad: “Yo lo hago mediante la meditación, Fede es más fanático que yo. La respiración pausada, consciente, la conexión interior me hacen muy bien. Los dos nos cuidamos, hacemos yoga, elongación, actividad física y comemos lo más sano y proteico posible”.
Un momento delicado para el que cuentan con todo el apoyo de su familia y amigos.