Antes de empezar, Susana leyó la medida cautelar que impedía mostrar imágenes de Morena y Rocío. Rial explicó la medida: "Esto es totalmente distinto a los de Diego Maradona y Verónica Ojeda. No es nueva, y yo puedo hablar de mis hijas porque son parte de mi vida. Pero no del juicio”.
Susana Giménez tuvo dos invitados especiales en su programa, que generaron expectativa por algún anuncio que podían llegar a dar. Eran Jorge Rial y Loly Antoniale, cuyo amor nació en abril del año pasado y conviven felizmente junto Morena y Rocío, las hijas del conductor.
“Soy feliz, Susana”, repitió Loly sin cansancio. El, por su parte, no se cansó de mirarla embelesado.
Antes de empezar, la diva leyó una medida cautelar enviada por Silvia D'Auro para prohibir mostrar imágenes de las hijas de Rial, que acompañaron a la pareja detrás de cámara. Susana leyó el dictamen. "Está prohibido difundir imágenes de las menores Morena Rial y Rocío Rial como así también dar a conocer cualquier circunstancia que rodee a las presentes actuaciones”.
Rial explicó la medida: "Esto es totalmente distinto a lo de Diego Maradona y Verónica Ojeda. No es nueva la medida, y yo puedo hablar de mis hijas porque son parte de mi vida. Pero no del juicio”.
La charla se dio al final del programa y no tuvo grandes momentos. La pregunta más incómoda de Susana fue cuando mencionó la decisión de las hijas de Jorge de vivir con él y “lo duro que debe ser para la madre” (Silvia D´Auro).
Rial respondió relajado y dio a entender que la elección de adoptar había sido de él. “Yo siempre digo que se cerró el circulo, que se abrió cuando decidimos adoptarlas, que fue una decisión, mía, y se termina ahora cuando ellas me elijen a mí. Hoy viven conmigo por voluntad de ellas. Tiene que ver una historia que vivieron que no quisieron vivir más. Ahora quieren vivirla con Mariana y conmigo”, afirmó el conductor.
Loly aportó lo suyo: “Estamos siempre juntas, yo lo único que quiero es que ellas sean felices. Basta de lo feo”.
Otro de los momentos más picantes fue el tema de la fertilidad de Rial. Susana arremetió con un “entonces esa mentira de la infertilidad era absurda. Fue una caballerosidad de tu parte, no dijiste nada”. “Yo nunca voy a decir nada. Dios quiso que sea de la otra manera, que fue maravillosa también”, contestó él.
Sobre el cambio en su vida tras el divorcio, el periodista destacó la actitud de sus hijas y la de Loly. “Cuando me separe me quede solo y ellas vinieron y me abrazaron. Venían por cualquier excusa todos los días a casa. La sanación llegó con Mariana”, reflexionó.
Loly: “No se nota la diferencia social en la convivencia ni en nada. Mirá las manos que tiene… ¡Es completo!”.
El motivo de esa “sanación” fue el amor, según Loly. “A ellos le faltaba el mimo, que estén en cada momento, respetar el silencio, todo…”.
ENTRE BROMAS E INDIRECTAS
El tema “bizarro” de la noche llegó de la boca de la modelo, quien hizo mención a las cualidades de su amado. “No se nota la diferencia social en la convivencia ni en nada. Mirá las manos que tiene… ¡Es completo!”. Susana ayudó a aclarar (aún más) el comentario. “Ah sí, dicen eso, que las manos… Bueno…”
Lo pendiente fue que Rial revelara, al menos algo, del sorprendente pedido de casamiento que le hará a su novia. “Si lo digo deja de ser una sorpresa”, admitió dejando la intriga abierta.
Será tema para otro programa.