“Locura mía, has llegado a una familia llena de amor. Tu mami es la mejor de todas. La más linda y la más polenta. Y tenés dos hermanos adorables".
El viernes 24 de mayo, Viviana Canosa (42) fue mamá de Martina, y Alejandro Borensztein, pareja y padre de la pequeña, incluyó la gran noticia en su tradicional columna de humor político que sale los domingos en el .
"Bienvenida Martina", era el título de la nota, que a modo de sátira le cuenta a la beba cuestiones políticas del país. "Por fin llegaste, mi princesa, mi vida, mi locura, mi hija. Hoy ya es domingo y es un buen día para que vayas entendiendo en dónde has caído y con qué te vas a encontrar", es el primer párrafo del texto.
"Antes que nada quiero decirte que la Argentina es un país bellísimo. Si naciste acá, éste es tu mejor lugar para vivir, aunque haya algunas dificultades que te iré contando. En principio, tenemos un problemita de emisión monetaria que provoca alta inflación lo que, sumado a la pobreza institucional, ha generado una falta de inversiones, una fuga de capitales y una fuerte caída de reservas, pero nada que te vaya a complicar tu primer semestre fiscal, muñequita mía. Tranquila, chiquitita de mi corazón", sigue la columna.
"Llegaste justo, bomboncito, para iluminar nuestras vidas, el presente y el futuro, y para mirarme con ojos con los que ninguna otra mujer me habrá mirado jamás. Bienvenida Martina, me temo que has llegado para enloquecer mi corazón".
La columna continúa con ironía y humor, presentando a su “tía Cristina (Fernández)”, “tío Amado (Boudou)” y a la otra parte de la familia: “tía Lilita (Carrió), tío (Hermes) Binner, tío Ricardo (Alfonsín)”, y otros referentes de la oposición.
Al final, el hijo del recordado Tato Bores hace referencia a su familia (la verdadera) dedicándole elogios a su mujer y a los hijos que él tuvo con Merlina Licht, su anterior pareja, fallecida en noviembre de 2010: “Locura mía, has llegado a una familia llena de amor. Tu mami es la mejor de todas. La más linda y la más polenta. Y tenés dos hermanos adorables. Uno nació cuando asumió tío Menem, pobre. El otro nació en Uruguay, un país muy parecido a la Argentina, pero civilizado".
Para cerrar, siguió con la sátira, pero dejó un tierno mensaje: "Sombras sin sentido cruzan estas tierras, pero vos llegaste justo, bomboncito, para iluminar nuestras vidas, el presente y el futuro, y para mirarme con ojos con los que ninguna otra mujer me habrá mirado jamás. Bienvenida Martina, me temo que has llegado para enloquecer mi corazón”.