"¿Que a mí me garpa hablar de Diego? A ella también le garpa publicar libros del padre, como La hija de Dios".
El sábado a la noche Luis Ventura habló de Diego Maradona en Secretos Verdaderos, su programa de América, y Dalma enfureció en Twitter alegando que era un “mentiroso” por brindar informaciones falsas. Así de simple y conciso: se trataba de una palabra contra la otra.
“Evidentemente te garpa mucho hablar de mi papá. ¡Mentiroso!”, escribió la hija del Diez en la red social, entre otras cosas. Y Ventura respondió.
En diálogo con Ciudad.com, el periodista fue al grano y contestó con ironía. “¿Que a mí me garpa hablar de Diego? A ella también le garpa publicar libros del padre, como La hija de Dios. Pero yo no hablo con las hijas de Maradona, que son chicas jóvenes y no voy a polemizar con ellas ni con las redes sociales”.
En su programa, Ventura afirmó que Dalma y Gianinna no venían a su abuelo Don Diego desde octubre, y que Rocío Oliva recibía 5 mil dólares por mes para cuidar a Diego, además de tener que mantenerlo lejos de Verónica Ojeda.
"Que no se adjudiquen ser las únicas hijas de Diego porque él tiene otros hijos que también hablan y sienten diferente a lo que ellas sienten".
Una vez más, el periodista sostuvo todo lo que dijo. “No digo más que lo que me ofrecen los testimonios. Para mí es tan válido una hija como un hermano o como un sobrino, porque son de la misma sangre de Diego. Y que no se adjudiquen ser las únicas hijas de Diego porque tiene otros hijos que también hablan y sienten diferente a lo que ellas sienten”, se defendió Ventura.
Dalma, en Twitter, afirmó que jamás se tomaría un café con Ventura. El contestó picante: “Está bien. Que no tome un café conmigo, que vaya a tomar un café con el abuelo, que la extraña porque no lo ve desde octubre”.
De todas maneras, no descartó -nuevamente con picardía- que álgún día puedan encontrarse. “Yo ya le dije que la puerta de mi casa está abierta, porque ella dice que yo invento, entonces bueno, que venga y yo le voy a demostrar que no invento”.
Una palabra contra la otra.