Después de 300 capítulos y casi un año y medio en pantalla, Dulce Amor llegó a su fin con un desenlace que no traicionó los sentimientos de la audiencia: Marcos (Sebastián Estevanez) y Victoria (Carina Zampini) terminaron enamorados, casados, y con dos hijos.
Algo parecido pasó con la historia de Brenda (Rocío Igarzabal) y Lucas (Nicolás Riera), y con la pareja de Gisela (Florencia Ortiz) y Julián (Juan Darthés), que siguieron juntos a pesar de la vuelta de Natacha (Calu Rivero). La novela mantuvo cautiva a la audiencia, con altos picos de rating. Durante abril, el último mes de la ficción, tuvo un promedio de 18.8 puntos. Y en el último capítulo batió sus récords, alcanzando un pico de 27.7, más de 2.500.000 televidentes sólo en Capital y Gran Buenos Aires.
“Por segunda vez me rescató el amor de Marcos. Lo que importa es mi presente y el futuro que voy construyendo con cada gesto, cada palabra, por todo el amor que siento por mi gente, mi familia”, fueron las frases de Victoria hacia el final del último capítulo. Después llegaron el casamiento y los hijos.
Sobre una nueva ficción con Zampini y Estevanez
En la gala del Gran Rex los protagonistas negaron que vaya a haber una segunda parte de esta historia, aunque confirmaron que tenían muchas ganas de volver a trabajar juntos. En diálogo con Ciudad.com, el productor Quique Estevanez comentó sus ganas de volver a apostar a esa dupla. “Preparo para fin de año una ficción conSebastián Estevanez y Karina Zampini, entre otros actores. Probablemente sea en Canal 11 aunque no tengo ningún contrato firmado”, adelantó.
Todo indica que habrá más dulces amores.