Marcela Feudale, invitada especial en Intratables, y el doctor Rubén Mühlberger, también de visita en el ciclo de Santiago del Moro, se cruzaron fuertemente y en vivo.
El problema comenzó cuando el médico hizo un "diagnóstico por ojo clínico", como él mismo denominó, sobre la salud de la panelista: "Ella tiene un problema con su carácter, una cuestión interna. No es lo simpática que se muestra... ¿Y los bravos cómo se ocultan? Como los mansos".
La periodista se sorprendió por la apreciación y dijo: "No, no, está exagerando, doctor. Yo me hice un examen de tiroides porque usted me dijo y el médico me dijo que dio bien. Difícilmente me arruine el viernes porque, por lo contrario, no soy malhumorada".
"Malhumorada no, de carácter fuerte. Te conozco desde que trabajás con Moria (Casán), pero cambiaste mucho desde tu carácter. Cuando vamos envejeciendo, o nos ponemos más amorosos o más a la defensiva o más débiles o más malos", replicó Mühlberger (quien ya había protagonizado una mediática pelea con el Dr. Máximo Ravenna en Un mundo perfecto, en 2011), y así sí estalló la discusión.
Feudale: -¡Hagan algo! Uno que cruce una lanza por mí.
Del Moro: Está en su mejor momento.
Mülhberger: -No es la misma chica que conocí cuando estaba con Moria, yo sigo siendo el mismo chico de pueblo que cuando vine a estudiar.
Feudale: -Usted supone que no soy genuina.
Mühlberger: -Le pido disculpas si la ofendí, pero no estoy de acuerdo con usted, yo sí soy genuino.
Feudale: -¿Por qué lo aclara?
Mühlberger: -¿Usted está haciendo esto para tener rating?
Feudale: -Yo no.
Del Moro: -Hay cosas que sonaron fuertes-, intervino el conductor intentando poner paños fríos, pero la disputa siguió.
Feudale: -Soy intensa, no soy la dueña de la verdad. El doctor cuando me siento empieza a dar un discurso sobre mi personalidad sin conocerme. En la época en la que me conoce con Moria venía de una etapa muy dolorosa de mi vida, enterrar a mi padre, atender a mis dos abuelas de 90 años. Moria significa una coyuntura en mi vida porque me saca de ese estado en el que ni siquiera era yo. Si él dice que yo era esa, la genuina, me parece que se está equivocando...
Mühlberger: -Si usted entendió eso, le pido disculpas. No le estoy diciendo eso ni nunca se lo diría, manejo gente hace 30 años, ayudo a gente. Pero creo que como médico le puedo decir con mi ojo clínico y con toda mi humildad...
Feudale: (Interrumpe) -Bueno yo le traigo a mi médico y mis análisis. Yo tengo mi médico de cabecera.
Mühlberger: ¡Entonces que se quede con su médico!
Feudale: -Todo tiene su lugar, no estoy ofendida ni mucho menos.
Santiago del Moro, un tanto sorprendido, cerró el tema diciendo: "No sé ni cómo llegamos a todo esto".
Dale play al video y mirá el momento del fuerte cruce.