Impacto y zozobra generó en la mañana del miércoles la trágica noticia de la muerte de un ciclista en Pilar, luego de ser atropellado y llevado 17 kilómetros por Panamericana hasta el punto de peaje (según las primeras versiones, con el cuerpo "colgado" en el capó del vehículo). La víctima se llama Reinaldo Rodas (53) y era vigilador privado.
Horas más tarde, sorpresivamente, el reconocido periodista y conductor Eduardo Aliverti informó que Pablo García (30), quien manejaba el Peugeot 504 involucrado en el hecho, es su hijo.
Aliverti (cuyo nombre completo es Eduardo Pablo García Aliverti) escribió en el perfil de Facebook de Marca de Radio, su programa en La Red una carta:
"Acá estoy, en uno de los momentos más dolorosos de mi vida, producto de hechos que involucran a parte de mi familia y que tomaron estado público en las últimas horas. Pablo García es mi hijo. Sólo puedo decir que mis sentimientos y el de mi familia acompañan principalmente a los familiares de la víctima, que se está a disposición de la Justicia -ya actuante- en todo cuanto sea necesario para el esclarecimiento de esta desgracia igual de desgarradora que de irreparable y que nuestro objetivo es la estricta igualdad ante la justicia.
Sólo quiero pedir, frente a las versiones circulantes, que todo lo relacionado con los detalles y marcha de la causa sea vehiculizado a través de los canales correspondientes, evitando especulaciones de otro tipo. Sólo eso. Es lo único que deseo y debo pedir. Gracias si puede ser así.
Eduardo Aliverti".
Según informó el periodista Mauro Szeta en TN: "El primer examen de alcohol en sangre, Pablo García habría tenido un dosaje de 1,45 mg". En otras palabras, casi el triple del máximo permitido para manejar, que es 0,5.
El accidente ocurrió el domingo a las 5,30 de la madrugada en el kilómetro 55 de la mencionada autopista. García se dirigía desde Pilar hacia Tortuguitas, mientras que Rodas iba en su bicicleta hacia el country Mapuche donde trabajaba como seguridad.
Las pericias aún están en marcha y podrían complicar el panorama del hijo de Aliverti, quien -hasta ahora y tras una detención inicial- permanece libre, aunque imputado por el fiscal Domínguez por homicidio culposo. El delito es excarcelable y tiene como pena de seis meses a cinco años de prisión.