Renovado. Así está Ricardo Fort después de haber pasado por la delicada intervención quirúrgica en Mar del Plata que lo tuvo en terapia intensiva. Ahora deberá pasar por otra operación para recuperarse de su rodilla, “el único problema” de salud que le queda por resolver.
En diálogo con Ciudad.com, el empresario comentó que el jueves llegará la prótesis desde Estados Unidos. “Me pusieron una, se infectó, me la sacaron, y me pusieron un separador con antibiótico. Ahora me tengo que colocar la rodilla, es el único problema que tengo”, contó.
"La gente que no tenía que estar al lado mío se está retirando de mi lado”, aseguró Fort.
Desde que salió del Sanatorio de la Trinidad (donde fue trasladado desde Mar del Plata), Fort ha asegurado que está feliz y renovado: “Estoy totalmente cambiado. Dejé de fumar, hago una vida nueva. Cambié la forma de pensar, de vivir, de disfrutar a mis hijos y de disfrutar las cosas simples. Mis hijos están felices. Estoy muy casero. Los tengo todo el día jugando con ellos, pegados al lado mío”.
Pero, aún así, hizo una salvedad. “Por supuesto que no me convertí en un monje tibetano, pero estoy más enfocado en la familia, mis amigos y en limpiar mi entorno. La gente que no tenía que estar al lado mío se está retirando de mi lado”, aseguró.
De todas formas, Fort, aún operado y tras haber cambiado ciertos hábitos, no perdió ciertas costumbres... Antes de terminar la charla, interrumpe el diálogo, y luego explica: “Perdón, es que estoy haciendo una compra… de un auto. Ya me compré tres ya, ja, ja, ja. Tres Mercedes Benz y dos Peugeot. Me estoy mimando”.
Bienvenidos los mimos, entonces. Y los cambios.