Si hay alguien que no se calla nada en Bailando 2012 es Andrea Rincón. Es más, a esta altura, la protesta y la catarsis en vivo se han convertido en su sello personal: a ella algo no le gusta, y lo dice, de una y sin anestesia.
"No sé qué ves y cómo medís. ¡Te queda grande ese sillón, flaca!”, le dijo Rincón a Escudero, que no se inmutó ni un poco. Finalmente, la vedette fue salvada por el jurado.
Eso pasó en el rock and roll cuando conoció el voto secreto de Silvina Escudero que derivó en su sentencia. A diferencia del 10 que la jurado le puso a Matías Alé, a ella le puso un 7... y saltaron las chispas.
Con muuuchos gestos, Andrea se sacó la bronca: “Le ponés un diez a Alé y a mí un 7, que hizo así nomás. Sé que vengo y si está Silvina tengo baja nota. No valorás nada, flaca. No sé qué ves y cómo medís. Hay gente que le queda el sillón grande. ¡Te queda grande ese sillón, flaca!”. Pero Escudero, con aires de calma, dijo lo que dice siempre, básicamente: “A las agresiones no voy a contestar. Lo mismo pasó con Carmen, no puede recibir una devolución”.
Rincón abandonó el estudio protestando con furiosa, y tras bambalinas estalló en llanto. Pero, hacia el final del programa las lágrimas cedieron: la vedette fue salvada por el jurado y se salvó de ir al teléfono contra Florencia Peña, quien quedó sentenciada tras su accidente en los ensayos del cuarto giratorio.