La última edición de Gran Hermano llegó con participantes decididos a ser miembros activos del juego. En esta oportunidad fue Eloy Rivera quién decidió quedar nominado. ¿Cómo lo hizo? Incumpliendo una prueba que le había tocado en el cuarto rojo, que tenía como sanción llevarlo a la placa de posibles eliminados.
"Lo hago para neutralizar la fulminante", avisó Eloy, cuando Gran Hermano le comunicaba la sanción, estrategia que pondría desde el vamos a cuatro personas en la cuerda floja.
Pero no lo hizo solo. El joven twittero arrastró a sus compañeros en la prenda Valeria y Mariano, a los que les tocó llevarse la peor parte sin buscársela. "Lo hago para neutralizar la fulminante", avisó Eloy, cuando Gran Hermano le comunicaba la sanción, estrategia que pondría desde el vamos a cuatro personas en la cuerda floja.
Una de las más afectadas por la decisión fue Valeria, que lloró antes de ingresar al confesionario al saber lo que se le venía.
En la última gala fue Mariano el que al ingresar al cuarto rojo se llevó como "premio" una semana donde debía, junto a dos compañeros más, acatar todas las órdenes de sus compañeros de convivencia, además de realizar tareas como limpiar todos los cuartos, hacer las camas y mantener limpios la pileta y el jacuzzi.