El famoso productor de cine que se convirtió en el centro de la explosión de denuncias de abuso y acoso sexual en Hollywood, Harvey Weinstein, se entregó hoy a la Policía en Nueva York.
En medio de un enorme cordón de periodistas y de declaraciones celebratorias de muchas de las actrices que lo denunciaron, Weinstein se entregó junto a sus abogados para ser registrado en una comisaría y luego fue trasladado a un tribunal de Manhattan, donde escuchó los cargos en su contra, informó la agencia EFE.
El caso lo está llevando la Fiscalía del distrito de Manhattan, a cargo de Cyrus Vance, quien a sí mismo está siendo objeto de una investigación por no impulsar el procesamiento de Weinstein antes, cuando recibió denuncias contra él hace varios años.
El productor cinematográfico también enfrenta cargos de abuso y acoso sexual en la ciudad de Los Angeles y en la capital británica, Londres.
Minutos antes de que el productor se entregara a la Policía ante las cámaras de los canales de televisión estadounidense, algunas de sus víctimas celebraron el momento en las redes sociales.
"Hoy estamos un paso más cerca de la justicia. Que esta detención dé esperanza a todas las víctimas y sobrevivientes de todas partes que están contando su verdad", escribió en Instagram la actriz Rose McGowan, una de las primeras en contar los ataques sexuales de Weinstein.
El juez Kevin McGratho lo dejó en libertad tras imponerle 10 millones de dólares de fianza (8,5 millones de euros), de los que un millón deberá pagarlo en efectivo. La cifra es mucho más alta de los dos millones que, se especulaba, había pactado con el fiscal Cyrus Vance. Además ha tenido que entregar su pasaporte y llevará un brazalete electrónico.
Fuente: Telam.