El sueño de Mirtha Legrand era tener al papa Francisco de comensal, pero ante la imposibilidad de asistir personalmente, el Pontífice le envió una cálida carta a la diva. Cuando se dirigía a recibir el diploma por su nominación como mejor actriz por su rol en La Dueña, la Chiqui expresó su alegría ante Implacables.
"Le mandamos una carta a través de la nunciatura, y acabo de recibir la respuesta. La voy a leer el día que vuelva a la televisión, el sábado 3 de agosto a la noche. Pero fue una carta divina, me dijo que vaya a Roma a visitarlo, que no aceptó porque no hace entrevistas, que me bendice. Y que recuerda películas mías y de mi hermana".
Muy feliz, Mirtha remató: "¿Quieren que les cuente? Lloré".