Dieciséis ancianos internados en el geriátrico Bello Horizonte de San Miguel fallecieron en las últimas horas contagiados de coronavirus, y sus autoridades señalaron falencias en el accionar del personal del municipio a la hora de activar el protocolo. El testimonio de la hija de una de las víctimas fatales, que señaló en Los Ángeles de la Mañana que los encargados del procedimiento habrían violado los deberes de funcionario público, hizo quebrar en llanto a Karina Iavícoli.
La mujer explicó que los funcionarios les dejaban la comida en la puerta a ancianos que no podían movilizarse, y que las últimas palabras que oyó de su madre fueron "voy a estar bien". Mientras transcurría el testimonio, la cámara tomaba a Karina Iavícoli (50) notablemente compungida, pero hacia el final se la podía ver llorando desconsoladamente.
"¡Ni a un perro se lo trata así!", dijo la panelista, secándose las lágrimas. "Es verdad. Ni a un perro se le tira la comida en la puerta de la habitación, a gente grande que no podía movilizarse. Los dos casos que hablamos fueron igual", agregó Ángel de Brito.