Todo el peso de la ley está por caer sobre las espaldas de Luca Singerman (21), el joven que abordó un barco de Buquebus en Colonia, Uruguay, para regresar a Buenos Aires, previas vacaciones por Europa. Es que el rugbier no solo se enfrenta a una pena de hasta 15 años de prisión por infringir el artículo 229 del código penal por “saber que podía estar enfermo” y esparcir el coronavirus, sino que además la Ciudad de Buenos Aires buscará que Singerman pague por el millonario operativo que debió afrontar el Estado.
“La Ciudad lo va a demandar por 700 mil dólares porque es el costo que se calcula que insumió el operativo de ir con ambulancias al puerto y trasladar a 400 personas a diferentes hoteles”, aseguró Rolando Barbano en Telenoche. De todas formas, el periodista aclaró que se aguarda la respuesta de la fiscal federal de la causa, Alejandra Mangano para saber si prospera el planteo contra el ex Buenos Aires Criquet & Rugby Club.
“La Ciudad lo va a demandar por 700.000 dólares porque es el costo que se calcula que insumió el operativo de ir con ambulancias al puerto y trasladar a 400 personas a diferentes hoteles”.
Por lo pronto, Luca Singerman fue trasladado al sanatorio Agote. Además, Olé publicó parte de un audio en el que el joven da su versión de los hechos: "Estábamos volviendo y me llega el mensaje que tenía coronovirus. Dijimos que había que ser respetuoso y avisarle al capitán (...) Nos podíamos haber hecho los boludos".
Por una confusión de nombres, en las redes sociales acusaron a Luca Bonomi, el exnovio de Cande Tinelli, de haber sido el protagonista del escándalo y él se defendió con vehemencia.