Van llegando las últimas instancias de Bailando 2018 y con ello, los nervios en cada gala. Luego de que el jurado criticara la performance de Lourdes Sánchez y Diego Ramos (con un cero incluido de Marcelo Polino), Vanesa García Millán -la coach de la pareja- descargó su malestar.
"A mí me tiene un poco cansada de todo lo que se habla detrás de esta pareja (por Lourdes y Diego). Estuvieron diciendo que nosotros teníamos que abrir los ritmos porque nunca lo hacemos, que Lourdes es la preferida, que tienen bailarines, que esto, lo otro. Y nunca tienen en cuenta que hay una persona que no es bailarín", comenzó diciendo en referencia al actor, que no baila profesionalmente.
García Millán: "Lo único que espero del jurado es que tengan la misma coherencia con el resto de los no bailarines. Porque siempre después los conmueve, 'ay qué lindos que estuvieron', 'me llegaste al corazón', 'se te vio divino'. Si mantenemos la coherencia, todo bien".
"Lo único que espero es que tengan la misma coherencia con el resto de los no bailarines. Porque siempre después los conmueve, 'ay qué lindos que estuvieron', 'me llegaste al corazón', 'se te vio divino'. Si mantenemos la coherencia, todo bien", agregó.
Luego, al turno de que Sofi Morandi y Julián Serrano hicieras su presentación, la alarma de la coreógrafa se encendió: "Esta es una de las parejas que siempre conmueven. Vamos a ver. Son divinos de verdad pero ojo acá".
Finalmente los jóvenes recibieron buenas críticas y cosecharon un total de 15 puntos, contra los 11 que consiguieron la mujer del Chato Prada y el galán.