Cuando Chano Charpentier recibió el alta del Sanatorio de la Trinidad, eligió el hermetismo mientras su nombre continuaba resonando en los medios, luego del polémico accidente que protagonizó en el barrio de Belgrano. Ahora, desde las cercanías de la ciudad bonaerense de Capilla del Señor, en plena recuperación de los golpes provocados por el choque y -sobre todo- por las agresiones recibidas de parte de transeúntes, el cantante rompió el silencio.
"Estoy descansando. Estoy bien. Me vine para acá para que pase un poco todo esto. Este lugar me gusta y me hace bien", afirmó el músico a Caras.
"Estoy descansando. Estoy bien. Me vine para acá para que pase un poco todo esto. Este lugar me gusta y me hace bien", le dijo el músico a la revista Caras, mientras permanece en una casa que es propiedad de Juana Viale.
La misma revista muestra cómo fue el reencuentro de la ¿expareja? antes de dirigirse al apacible destino y cómo aprovecha el músico el campo de su pareja para hacer paseos en cuatriciclo junto a una amiga que se encarga de cuidarlo.
Chano prefirió no referirse puntualmente al violento accidente que protagonizó. Sólo se limitó a decir: "Me mataron a palos", en alusión al ataque de algunos vecinos del barrio, luego de que su camioneta chocara a varios autos estacionados y rompiera el portón de una casa.
SUS DÍAS TRAS EL ACCIDENTE
Antes de alejarse del ruido de la Capital Federal, Chano estuvo unos días en su casa porteña. Infama mostró al líder de Tan Biónica en la terraza, mientras revisaba su tablet; y haciendo compras en un supermercado, con anteojos y con su rostro todavía hinchado.