Una maestra de la provocación, Victoria Vannucci (31) es pura sensualidad en la nueva portada de Caras. La mujer de Matías Garfunkel (40) posó para la revista súper sexy a tan sólo cuatro meses de dar a luz por cesárea a su segundo hijo, Jorge Napoleón (ya es mamá de Indiana, de 1 año y 9 meses).
En la entrevista, Victoria reveló cómo hace para mantener su escultural figura y sus secretos de belleza resultaron, al menos, ¡extravagantes! “Por suerte soy una mujer afortunada y recibo ayuda con los chicos. Aprovecho la vida hermosa que tengo para levantarme todas las mañanas e ir al gimnasio que me armé en mi propia casa. Y no es sólo un trabajo de endurecer los músculos o hacer dieta, es una cuestión de actitud”.
"Lo más extravagante que hago es tomar un baño de inmersión en el jacuzzi, porque uso sales del Mar Muerto, que tienen un poder impresionante".
¿Cómo es la rutina para estar espléndida? “Todas las mañanas medito para seguir teniendo esa energía, para mejorar y estar bien con mi cuerpo. Llevo una dieta alimentaria muy estricta. No como carne, ni carbohidratos, sólo pescados, frutas y verduras y complemento lo que no me da la carne con muchas semillas, porque aprendía las propiedades de cada una. La lactancia también me ayudó a bajar de peso, aunque no engordé mucho en ninguno de los embarazos. Me cuidé y en especial con Indiana, porque con ella sufrí diabetes gestacional”.
Pero Vannucci confesó su mayor extravagancia a la hora del cuidado estético: “Cada mañana tomo jugo de limón tibio, porque te limpia el cuerpo, y después sigo con otro jugo verde, de pepino, brócoli, perejil y apio. Es horrible pero te acostumbrás. Aunque creo que lo más extravagante que hago es tomar un baño de inmersión en el jacuzzi, porque uso sales del Mar Muerto, que tienen un poder impresionante”.
“Me traje sales no sólo en ese formato sino en geles. Le dan un brillo y una pureza a la piel que no conseguís con otro producto. No tomo sol y eso mejora todo, pero estas salen hacen que la piel tenga una textura increíble, son curativas y me dan mucha energía. Lo hago dos veces por semana y luego me someto a masajes durante 20 minutos. También me traigo sal azteca, que es de color rosa, para las comidas, porque tiene propiedades energéticas”, finalizó Victoria. ¡Mirá vos!