"Luciano está entusiasmadísimo. Me acompaña a las ecografías, viene al obstetra conmigo, elige ropita. Está pendiente de mí".
En menos de dos meses, Luciano Castro (38) y Sabrina Rojas (33) cumplirán el deseo que tanto anhelaron: nacerá su primera hija, concebida luego de una separación y reconciliación que los terminó uniendo más que nunca.
En una entrevista con la revista Gente, la actriz contó cómo se siente con el embarazo y reveló el nombre de la beba, que se venía barajando: "Ya tenemos casi todo el cuarto de la beba armado. Estamos tan felices que te voy a dar la primicia. Se llamará Esperanza y nacerá a principios de julio".
Si hay mujeres que no se sienten a gusto con los cambios en el cuerpo, la revolución hormonal, y otras consecuencias del embarazo, ése no es para nada el caso de Rojas, quen disfruta cada aspecto de la dulce espera.
"Cuando me decían que la maternidad es el mejor estado de una mujer, pensaba que exageraban. Hoy te juro que es así: estoy viviendo los mejores meses de mi vida. Me siento plena, malcriada, contenida y feliz".
"Cuando me decían que la maternidad es el mejor estado de una mujer, no lo creía, pensaba que exageraban. Hoy te juro que es así: estoy viviendo los mejores meses de mi vida. Me siento plena, malcriada, contenida y feliz. El sábado me comí una cheesecake de frutos rojos que me hizo mi mamá y no sentí culpa", comentó.
La contención viene de toda su familia, del actor y hasta de Mateo (11), hijo de Castro. "Con Lu y Mateo estamos embobados. Desde un principio, ellos –que están enamoradísimos de mi panza- querían que sea nena, a mí me daba lo mismo porque soy primeriza".
El actor lo vive con el mismo ímpetu que ella. "Luciano está entusiasmadísimo. Me acompaña a las ecografías, viene al obstetra conmigo, elige ropita. Está pendiente de mí, me viene a buscar a todos lados. En los primeros meses lo tuve loco con mis antojos de hamburguesas. Pero Mateo y Luciano son un amor y se bancan como reyes a mis hormonas, que están revolucionadas", afirmó la modelo, que espera a Esperanza entre mimos, antojos y mucho amor.